Cuando viajo por Argentina, trato de buscar lugares recomendados para comer. Fue así que, en nuestro viaje a Mendoza en 2019, fuimos a comer a Fuente y Fonda en Mendoza, un restaurant muy tradicional y casero que recomendó SirChandler en su blog.

Éste es uno de esos posts que me quedaron en el tintero porque, en su momento, tenía mucho material y fue quedando en borrador. Así que por eso lo estoy publicando un año y pocos meses después.

Si me pidieran recomendación para comer en Mendoza y pudieran ir a un solo lugar, les diría que vayan a Fuente y Fonda. Es de esos lugares que implican toda una experiencia, no sólo es ir a comer. Pero no porque sea exclusivo o súper top. Al contrario, es un lugar donde sirven comida hogareña, de la que preparaban las madres y las abuelas de antes (y ahora también).

Para reforzar este concepto, sirven la deliciosa comida en fuentes y fondas antiguas, medio vintage. Me parece que ese detalle le da un toque extra, así como la decoración que nos retrotrae a nuestras infancias de los 80s y los 90s, e incluso mucho antes pero soy millennial, sepan disculpar.

Los platos son para compartir porque te sirven una fuente o una fonda de cada plato. Pregunten si pueden pedir media fuente, dependiendo si tienen o no mucha gente en el salón. A veces es puede, a veces no. De todas formas, a pesar de que la mayoría de la carta incluye opciones con algún tipo de carne, hay varias alternativas para vegetarianos. Pueden chusmear la carta en su web, si tienen dudas.

El restaurant en sí es una casa antigua. Se puede comer en su patio techado, que me trae nuevamente recuerdos de mi infancia y de patios similares, o en alguna de las habitaciones que hacen de salón cerrado. Nosotros fuimos a comer ahí dos veces, un viernes a la noche y un domingo al mediodía.

La primera vez comimos adentro, y la segunda optamos por el patio ya que el día estaba hermoso y entraba luz natural. No hacía nada de frío ese día a pesar de ser agosto, pero aparte tienen calefacción para que el patio sea súper acogedor. Y está techado, no dejemos de lado eso.

En ambas ocasiones, salimos de Fuente y Fonda con las panzas llenas y los corazones contentos. A pesar de que estábamos «a reventar», pedimos postre y quedamos más llenos todavía, pero felices.

En su momento, retraté mi felicidad en Twitter ja.
Creo que necesito un ayuno de una semana 😅 (son canelones de calabaza y, sí, volvimos a Fuente y Fonda). pic.twitter.com/yp58r0qe8K
— Nair Felis Rodríguez (@nairfelisr) August 11, 2019
Pueden reservar (recomendado si es un finde de noche) o pedir más información por WhatsApp. Fuente y Fonda se encuentra en Montevideo 675, frente a la plaza Italia, ciudad de Mendoza.

Si ya fueron o conocen, no se olviden de comentar si comparten mi apreciación por este lugar. O también pueden contarme de otros restaurantes en Mendoza que conozcan.