Conocido en francés como le Château de Versailles, este famoso castillo es una visita habitual para los turistas que deciden hacer una excursión cercana a París. Si vas a viajar a la capital francesa, no te pierdas el Palacio de Versalles.
Si alguna vez soñaste con sentirte parte de la realeza francesa del siglo XVII, un paseo por este palacio te hará vivir esa experiencia por un día. El château fue la residencia real desde 1682 hasta la Revolución Francesa.

Breve historia del Palacio de Versalles
Cuanta la leyenda que al rey Louis XIV no le gustaba nada París por temor al caos y el desorden que aquella ciudad generaba. Por eso amaba tanto el Palacio de Versalles, que antes de ser sede del gobierno era una residencia de verano tranquila y alejada de la temible urbe. A pesar de que Monsieur Jean-Baptiste Colbert, ministro del rey, había hecho acondicionar el Louvre (que fue residencia real antes que museo) y el Palais des Tulleries (otro palacio donde habitaban monarcas), Louis XIV no quería saber nada con vivir en otro lugar que no fuera Versalles.
Así que el rey hizo echar abajo el pueblito cercano a la residencia para dar rienda suelta a las construcciones que tanto le gustaban. El lugar le permitiría llevar a cabo todas sus ambiciones. Además del palacio y sus hermosos jardines, Louis XIV construiría una ciudad moderna, con calles rectas, limpias y despejadas. Todo lo contrario a lo que era París por aquél entonces.

Si bien Louis XIII, que había comprado el terreno en 1632 y había mandado a construir en ese lugar un palacio de caza con dos jardines, el verdadero creador del Palacio de Versalles fue su sucesor. Louis XIV quería construir un castillo digno de su época.
Hoy en día, el inmenso complejo cuenta con tres palacios, grandes jardines y un parque. Ocupa 800 hectáreas, 20 kilómetros de caminos (que se pueden recorrer en bicicletas o carritos de golf, que se pueden alquilar ahí mismo), 200.000 árboles, 35 kilómetros de canales, 11 hectáreas techadas, más de 2000 ventanas y 67 escaleras.
Además de los bellos jardines clasicistas, el palacio cuenta con distintos pabellones y edificios notables, como la Galería de los Espejos, construida con el fin de deslumbrar a los visitantes. Aparentemente, a Louis XIV le atraían el lujo y la ostentación, y por eso le gustaba tener objetos suntuosos dispuestos a lo largo y a lo ancho del castillo.

De estilo barroco, esta galería tiene más de 70 metros de largo por 10 de ancho, y está cubierta de grandes ventanas por donde entra muchísima luz que se refleja en los más de 300 espejos dispersos por toda la sala. Imagínense la novedad en el siglo XVII, cuando las personas podían verse de cuerpo entero por primera vez (no era común tener espejos y mucho menos de tamaño natural). Muchos muebles y esculturas de aquella galería desaparecieron durante la Revolución Francesa.

En 1687 se construyó el Gran Trianón según los planos del arquitecto Jules Ardouin Mansart. Anteriormente, en el mismo lugar se encontraba un Trianón de porcelana, donde Louis XIV acostumbraba a relajarse o cenar con sus amantes. Pero la construcción en porcelana hacía débil al recinto, por lo que construyeron el nuevo Trianón en mármol.

El Gran Trianón es de estilo clásico francés con toques italianos. Los muros son de piedra dorada y las columnas de mármol rosa.
Otra construcción digna de ser visitada es el Pequeño Trianón, que se encuentra al sudeste del Gran Trianón. Fue creado en el siglo XVIII por el rey Louis XVI y tuvo como propósito albergar un zoológico, un jardín botánico, una escuela y un invernadero. Una vez finalizado, el rey le regaló el Pequeño Trianón a su esposa, María Antonieta. La reina era odiada por todos en Francia debido a la gran vida que se daba y por cómo influía a su marido en favor de Austria. Al igual que Louis XVI, fue guillotinada en el marco de la Revolución Francesa.

Los jardines de Versalles son, en su mayoría, de estilo francés (jardines formales al nivel del suelo, compuestos de lechos de flores o hierbas y delimitados por otras plantas y piedras). Además del césped y las flores mantenidos cuidadosamente, los jardines contienen esculturas y fuentes en toda su superficie. Es una buena idea hacer un picnic en los jardines para descansar el paseo, ya que en el Palacio de Versalles se camina mucho.
Hay un enorme lago artificial de forma de cruz que se puede recorrer en bote. Nosotros pagamos 15 euros la media hora por el alquiler. Eso sí, hay que estar en buen estado físico para remar 😉
Muchos creen erróneamente que el Palacio de Versalles está ubicado en París. No podrían estar más equivocados, ya que el castillo se encuentra en la ciudad del mismo nombre, perteneciente a Île de France o Région Parisienne.

Información útil
La entrada a los jardines es gratuita, pero no así al Palacio (15 euros) ni a los Trianones (10 euros).
Las visitas guiadas tienen un costo adicional a la entrada de 7 euros.
Con la tarjeta Paris Museum Pass no hace falta pagar nada adicional, aunque no es posible sortear la fila como en otros museos de París.
Horarios*
[su_spoiler title=»Hacer click para ver los horarios»]Del 1 de noviembre al 31 de marzo: Palacio: De 9h a 17h30. Palacios de Trianón y Dominio de María Antonieta: De 12h a 17h30. Jardín y Parque: Todos los días 8h – 18h. Del 1 de abril al 31 de octubre: Palacio: De 9h a 18h30. Palacios de Trianón y Dominio de María Antoniet:a De 12h a 18h30. Jardín: Abierto todos los días 8h a 20h30. Parque: Abierto todos los días 7h a 19h para los vehículos; 7h a 20h30 para los peatones[/su_spoiler]
*El Palacio y los Palacios de Trianón y Dominio de María Antonieta cierran los lunes, el 1 de enero, el 1 de mayo y el 25 de diciembre.
Cómo llegar desde París: No hace falta contratar una excursión. Te tomas el tren RER C en cualquiera de sus estaciones del tramo central (Champ de Mars-Tour Eiffel, Pont de lÁlma, Invalides, Musée d’Orsay, Saint Michel-Notre Dame, Gare d’Austerlitz, etc). Cada tramo sale 3,45 euros, por lo que el billete ida y vuelta cuesta 6,90 euros. Si vas a comprar la tarjeta Paris Visite, tenés que comprar la que va de la zona 1 a la 5.
Hay que comprar el billete «Paris – Versailles Rive Gauche». A no confundirse que el billete de metro o de RER común (T+) no sirve en este trayecto. Se compra en las boleterías y te podés hacer entender en inglés. En caso de que no te entiendan, podés decir «Un billet / deux billets / trois billets Paris – Versailles Rive Gauche, aller et retour, s’il vous plaît». Acá podés ver más frases en francés.
También podés tomarte el tren SNCF desde la estación París Montparnasse a Versailles Chantiers (que cuesta lo mismo que el RER C) o desde París Saint Lazare a Versailles Rive Droite (cuesta 4,20 euros cada tramo, o sea, 8,40 euros ida y vuelta). Pero es mejor tomar el RER C (color amarillo).
Más información sobre tarifas de tren, en este link (en inglés).
Sitio web en español: click aquí.
Holaaaaaa mira donde te vengo a encontrar jajajajaja si la verdad q me encanto leer tus historias, hace un mes me fui de luna de miel para europa, y la verdad que no queria volver, sin dudas me quede enamorada de cada pais que fui, me encantaria seguir viajando y conociendo nuevos paises culturas y demas.
Paris fue soñado, es caro pero es hermoso.
Te mando un besote grande Nair.
Mua
Hola Vicky! Qué lindo! Es difícil querer volver de Europa ;P
Beso!